30 diciembre 2006

EN TIERRA





El pirata, por fortuna, ya ha llegado, atravesando la mar y el cielo.

Otras cosas, desgraciadamente, no acaban de llegar a buen puerto...

BARAJAS

Por una vez, me voy a dejar llevar por el cabreo del momento.

Mi hijo el pirata tiene un vuelo para hoy. Hace tres meses que no le veo. Viene a pasar la Nochevieja con nosotros. Con su familia. Ahora no sé qué va a pasar. Alguien quiere jodernos las fiestas y el reecuentro. Sean quienes sean, son unos hijos de puta. Quieren hacer daño e impedir que la vida siga su curso.
Espero que al final pueda abrazarle. Y no digo más. No entiendo cómo puede haber gente así. Pase lo que pase. Ya está bien. No hay nada que justifique un acto así. Ningún acto violento. ¿Qué puñetera clase de personas actúa de esa manera? ¿No tienen sentimientos? ¿Sólo odio? Ojalá que esa clase de gente desaparezca pronto de la faz de la tierra. Que sean capaces de abandonar esos métodos que sólo causan daño. Las cosas no se consiguen así.
Han puesto una bomba en el aeropuerto.


27 diciembre 2006

Contrarreloj



He pensado: tengo el blog muy abandonado, voy a ver si puedo escribir un post aunque sea desde el trabajo. Es una misión prácticamente imposible. Hay llamadas continuamente, una detrás de otra, sin descanso. Mira, ahora mismo parece que hay unos segundos de silencio. ¡Voy a aprovechar!... Ni en Navidad descansan, llaman y llaman, a lo mejor alguno de vosotros que me leéis ha hablado conmigo sin saberlo. En este puesto de trabajo me llamo Belén.

- Atención al cliente, buenos días, le atiende Belén...

Y respondo a ese nombre como si siempre hubiera sido el mío.
Me llamo Belén. Belén. Como mi sobrina. ¿Y por qué? Os preguntaréis... Pues porque en este trabajo no se pueden repetir nombres, y ya había una María José. Así que me puse el nombre de mi sobrina.
Mi sobrina ya tiene dos niños, a pesar de tener sólo 20 años... Uno se llama Noel. Así que estos días su casa es un poco más navideña que las demás.

Belén, Campanas de Belén...

En fín, que lo he conseguido.
He escrito un post en el trabajo!
Es que apenas tengo tiempo...

Campana sobre campana, y sobre campana una, asomate a la ventana, veras al niño en la cuna.
Belén, campanas de Belén,que los ángeles tocan¿qué nuevas nos traéis?
Recogido tu rebaño¿adónde vas, pastorcillo?Voy a llevar al Portal requesón, manteca y vino.Belén, campanas de Belén..
Campana sobre campana,y sobre campana dos, asómate a la ventana, porque está naciendo Dios.
Belén, campanas de Belén...
Campana sobre campana,y sobre campana tres, en una cruz a esta hora el Niño va a padecer.
Belén, campanas de Belén...
Caminando, a media noche, dónde camina el pastor le llevo al niño que nace como a Dios mi corazón.
Belén, campanas de Belén...
Jejeje...

21 diciembre 2006

Estos días ando falta de tiempo y me es difícil escribir. Mi hijo está aquí, llegó el sábado a un aeropuerto abarrotado de gentes desesperadas porque no podían viajar al encuentro de sus familias. Yo le abracé con fuerza dando gracias por mi suerte y deseando que los demás pudieran vivir el reencuentro igual que yo, impotente por no poder hacer nada por ellos. Había una niña que sostenía la imagen de un niño Jesús en sus brazos, acunándolo como si fuera una muñeca pepona, sentada sobre su maleta esperando un avión que la llevara a su hogar, con toda la paciencia del mundo.
Anda el personal alborotado por las fiestas que se avecinan, todo el mundo tiene alguna cena de Navidad con amigos o compañeros de trabajo. Yo tuve ayer una de esas cenas y hoy ando renqueando sin fuerzas para casi nada por los estragos del trasnochón. Mi ordenador está prestado a mi hijo por unos días el poco tiempo que estamos en casa, ahora ha salido y yo aprovecho para poner esto un poco al día, pero tengo tanto sueño que no sé ni lo que escribo.
Tengo varios correos pendientes de contestar y estoy recibiendo cristmas de navidad electrónicas y virtuales, lo cual constituye una nueva experiencia para mi, muy agradable por cierto, y quiero hacer una tarjeta navideña con mis mandalas para enviarla a mis amigos bloggeros, pero no estoy muy inspirada en estos momentos porque tengo sueño atrasado, y tengo que recuperarme un poco antes de hacerlo.
Mañana en el trabajo cada uno va a llevar alguna chuchería para celebrar estas fiestas y yo quiero hacer un bizcocho, pero no hay azúcar y no tengo ganas de salir a comprarla...
Y el sábado me voy al pueblo, porque en Nochebuena me gusta ir a mi casa a cenar con la familia en la nuestra casa grandota y destartalada. Y hay que preparar el equipaje.

Esta noche a partir de las doce todos tenemos una cita por una BUENA CAUSA... Os acordáis, verdad?
Y mañana a algún afortunado le cambiará un poco la vida, y los demás nos quedaremos como siempre con esa sonrisa boba pensando que "tal vez el año que viene", y brindaremos con sidra y nos comeremos un cacho de turrón como si tal cosa.

Y yo a la espera de estar un poco más despierta os deseo lo mejor a todos.

FELIZ NAVIDAD!

hahaha

13 diciembre 2006

CÓSEME EL PANTALÓN


Viene Sebastián con un pantalón nuevo.
Se lo ha comprado en un rastrillo que había en la Plaza Vieja. Esa plaza donde cada noche una gaviota perdida viene a recoger la esca
rcha que se posa en la estatua del centro. Nadie sabe de dónde vino la gaviota, tal vez llegó prendida sin querer en aquella barca que el vecino Miguel se llevó el último verano al mar. Nadie en el pueblo entiende por qué Miguel se ha comprado una barca. Si aquí no hay ni un pequeño charco en 200 km a la redonda...
Esta mañana la plaza estaba de fiesta. Había payasos saltarines haciendo reír a los presentes, y un puesto de palomitas que volaban
alegres a la caza de los niños despistados. Había unos músicos tocando el tambor mientras una cabra loca hacía piruetas al son de la melodía. Y puestos de bizcochos calientes, y de figuritas de mazapán. Y una jaima donde un delicioso té de hierbas se cocía al sol.
Sebastián se ha comprado unos pantalones a rayas. Verdes, azules y amarillas. Un pantalón risueño como pocos. Le está tan largo que no sabía si comprarse unos zancos o adaptarlo a la medida de sus piernas (un poco cortas, por cierto...)

Yo le he dicho:
- Si quieres te lo coso, Sebastián. No sea que te subas a los zancos y acabes haciendo surcos en la tierra de tu jardín con las narices...

Y me ha dicho que sí. Que mejor se lo cosiera para
poder vestirse de titiritero en el próximo carnaval, que será a finales de febrero.

He sacado del arcón mi costurero de madera con incrustaciones de madreselva. Aquél que me regaló mi abuela una primavera antes de que las nubes blancas se la llevaran para siempre a yo no sé qué lejano lugar...
No sabía con qué color de hilo debía coserlo. Tiene mi co
sturero hilos de todos los colores, y en un bolsillo creo que aún vive un gnomo muy pequeño que se permite dar consejos a diestro y siniestro. Eso explica por qué de repente un hilo de color morado me ha saltado a la cara alegremente nada más abrir la tapa, inexplicablemente ya enhebrado en una aguja de plata muy brillante. Y sin más me he puesto a coser.
Sebastián me miraba absorto mientras yo iba dando puntadas. Me ha dicho: ¿dónde has aprendido a coser, que se te da tan bien?
Después se ha probado los pantalones. Y le quedaban
bien. Le quedaban tan bien que el loro de la vecina se ha puesto a dar gritos desde la ventana, abriendo mucho el pico:

-!ESTÁS GUAPO SEBASTIÁN!, ¡ESTÁS GUAPO SEBASTIÁN!

Hasta que me he cansado de oírlo y le he tirado un carrete de hilo directo al pico por ver si se callaba, mientras Sebastián se reía
a carcajadas y daba volteretas con sus pantalones nuevos...

Ahora que he terminado, me iré a la plaza vieja a comprar una tarta de manzanas. No sé por qué, pero ahora me apetece un dulce...


12 diciembre 2006

DESMEMORIA


He tenido un día de trabajo intenso, estresante, de muchísimas llamadas. Al final de la tarde tenía ya un dolor de cabeza considerable. Cada día al llegar tengo que registrarme en la aplicación informática de la campaña con un numero de usuario que me diferencia de los demás. He pasado por tantos puestos distintos últimamente, que los números se mezclan en mi cabeza formando un batiburrillo con el que no hay quien se aclare.
Siempre he sido despistada, muy despistada. Pero no porque me fallase la memoria, que normalmente me ha funcionado siempre bien. Era porque siempre he tenido pájaros en la cabeza, siempre mi mente ocupada en un montón de historias no precisamente de carácter práctico. Nunca he tenido problemas para recordar números de teléfono y esa clase de cosas. Lo normal, vamos, no es que destacase por eso. Pero en estos últimos tiempos de vez en cuando tengo lapsus extraños y de repente olvido cosas que siempre he recordado sin problemas. Por ejemplo el nombre de algún actor que he conocido toda la vida, basta que me pregunten el nombre y de repente desaparece de mi cabeza. Así sin avisar, de sopetón. Sencillamente ese nombre no está, y me vuelvo loca intentando recordarlo. Debe ser cosa de las hormonas, esas que ya he mencionado varias veces. Es desconcertante.
Todo esto no tendría la mayor importancia si se limita a eliminar del disco duro datos irrelevantes. Pero cuando algo así te ocurre en el trabajo, y cuando además en el trabajo no andas muy bien en cuanto a relaciones con tus "superiores" o como se quieran llamar, esto se convierte en un problema que te puede dar más de un disgusto.
Y luego hay la cuestión de las incompatibilidades. Hay personas con las que nunca puedes conectar por la razón que sea, que por cuestiones varias pueden llegar a bloquearte y a sacarte de tus casillas. Personas que piensan que una cosa así nunca va a pasarle a ellas. Que se permiten el lujo de juzgarte. Y no contentas con eso, no dudan en humillarte cuando se tercie, a la menor ocasión. Que no saben respetar a los demás. Sencillamente.
Cuando una de esas personas es además tu jefe, o jefa, o como quiera que se les quiera llamar, entonces estás lista. O listo. No puedes bajar la guardia.
¿Y a cuento de qué viene todo esto?
Hoy he tenido uno de esos lapsus. Horror. Justo a la hora de salir, cuando ya me disponía a recoger mis cosas y largarme con viento fresco. Ella ( es ella) me ha preguntado cuál era mi número de usuario, el que usaba antes. El que he estado usando todos los días durante dos años hasta hace poco, hasta que me asignaron otro puesto donde ahora estoy.
- ¿Mi número de usuario? No hay problema, ahora mismo te lo digo... Ahora mismo te lo digo...

Y de pronto ese número ya no estaba ahí donde debía estar. En mi cabeza. Ha desaparecido.
Ella no tiene compasión.

-Pero ¿cómo que no te acuerdas? No puede ser que no te acuerdes. ¡Pero si lo has estado usando un montón de tiempo! Es imposible que lo hayas olvidado. ¿Pero cómo se puede ser así? No se puede ser así! Si es que no hay...!

Me ha dicho que lo buscase y se lo dejara pegado en un posit. Y se ha ido. Y yo lo he buscado. Entre mis papeles, en mi puesto, en mi memoria escacharrada. Pero no ha aparecido. Como por arte de magia ese número ya no existe. Y me he ido yo también, un cuarto de hora después, con esa sensación de impotencia y desconcierto que te deja pensando si no te habrás vuelto tonta de repente.
Pero no soy tonta.
Son las hormonas que me tienen frita.
Me he estado acordando del anuncio ese que ponen ahora en la tele sobre un método para ejercitar la memoria. La que lo anuncia, si hombre, es esta actriz que salía en Siete vidas, como se llamaba... cómo se llamaba... Era... era... ¡Amparo Baró!

Lo recordé!Espero que mi cabeza no se convierta en un desierto...

11 diciembre 2006

Meme-libro


Thalatta me manda un meme de un libro. Consiste en abrir el libro que tengas más a mano por la página 123, buscar la 5ª frase y transcribirla. Bien! Es un meme fácil. Tengo aquí cerquita un libro. Este que tengo a mano es "Las gemelas", de... a ver...Tessa de Loo. Lo abro por la página 123, a la derecha:


Sammy Goldschmidt, flautista en la orquesta filarmónica de la radio, escuchaba con los ojos cerrados, y Ernst Goudriaan, aprendiz de luthiers de Utrecht, apoyaba la barbilla en las puntas de los dedos. El anfitrión, invisible, manejaba sus aparatos detrás de las pantallas. Al finalizar el concierto, salió para servirse una copa y desechar sus elogios con una deliciosa modestia. En ese preciso instante, un ruiseñor rompió a cantar en el bosque, cuya espesura era ahora inexpugnable...

Es más de una frase, pero es que una frase era tan poco...

Y ahora sólo me queda pasar este meme a alguien. Y a quién va a ser... Pues señor, estos son los elegidos:

Fulanita de Tal, Gata Chata, María Manuela y Missing, a ver qué nos cuentan.

05 diciembre 2006

SOLA EN CASA




Venga lo reconozco. Estoy menopáusica perdida. Las neuronas me están revolucionando de arriba abajo. Es impresionante. Todo descolocao y yo otra vez como una adolescente. Y los sofocos. Yo pensaba que eso no me iba a pasar. Pero sí. Me pasa. De repente se me viene un fuego a la cara que no se puede aguantar, y tengo que estar con el abanico preparado a todas horas, por si acaso. Y si estoy sentada mucho tiempo luego no puedo levantarme!. Me quedo un rato doblada renqueando y los huesos parece que se me van a tronchar. Estoy taaan sensible! como un flan. He vuelto a tener síntomas de ansiedad, la tiroides anda escacharrá y provoca todo eso. De repente me doy cuenta de que estoy cansaaaaaaaaaaaaada pero que muy cansada. Y de vez en cuando se me pone la cabeza a cien y me ataca la migraña. Estoy deseando que pase todo esto de una vez!
Y tengo que tomar pastillitas. Yo que siempre he sido reacia a tomar medicamentos ahora tengo que tomar pastillitas. Una en ayunas para el hipotiroidismo, otra después de desayunar para la ansiedad, un ibuprofeno de vez en cuando para el dolor de cabeza. ¡Y estoy engordando!
Esto es un rollazo impresionante. Y todas tenemos que pasar por ello. Todas.
Esta noche estoy sola en casa y es martes. Ahora me iré a ver la tele un rato que ponen "House", y me gusta. Se han ido todos. Y alguno hay por ahí que está durmiendo ya.
Buenas noches.

RECOMENZAR


Escribo este post en honor a Lolita. Y me visto con mi primer traje, porque Lolita me ha hecho pensar en los principios. Ella lo ha descrito muy bien. Su proceso. La idea con la que comenzó el blog, el motivo por el que ahora lo deja descansar. Ella ha cumplido su objetivo. Sus páginas y sus escritos le han servido de mucho. Y no sólo a ella. También a los que la hemos leído casi cada día.
Desde aquí puedo decir que admiro la forma en que lo ha hecho. Cómo ha conseguido expresar sus pensamientos, cómo ha acertado a plasmar su vida de cada día. Ha sabido ser sincera con ella misma y con los demás. Se ha mostrado tal como es y nos ha dejado compartir.
Todo eso es admirable. Yo empecé con parecidos propósitos. Creí que sería más fácil. Pero no lo es.
Te sientas aquí y te enfrentas a tí misma. Una hoja en blanco. Te enfrentas a tu verdad. Y a veces esa verdad esconde cosas que no quieres confesarte. Y simplemente lo dejas para otro día. O cambias de tema. O te enfadas porque no aciertas a contar lo que piensas, no aciertas a escribir para tí sola, porque sabes que te están mirando. Que te están leyendo. Y ya no es lo mismo. No es como cuando realmente coges un cuaderno y un lápiz y te pones a largar cosas que solo tú leerás, y eso te sirve de terapia, de catarsis.
Y es cierto que esto del blog requiere tiempo. Mucho tiempo. Que hay que sacrificar cosas. Esos ratos de silencio con un libro en la mano, tomando un té tranquilamente con la mente en reposo. Esa tranquilidad conquistada de la que ya alguna vez os he hablado.
Son muchas cosas.
Ella lo ha hecho bien.
Yo aún no tengo muy claro hacia dónde voy con esto.
No me voy aún. Yo no hasta que no sienta que he conseguido expresar algo. O hasta que no sepa para qué y por qué lo empecé.
Me preguntaba una amiga hace unos días qué sentido tiene escribir tus pensamientos en un lugar donde cualquiera puede leerte. No supe responderle bien.
Pero luego me pregunté: qué sentido tienen tántos y tántos libros escritos?. Que todos leemos. ¿Y esto, no es algo parecido?

Lo voy a pensar.
Lo voy a pensar vestida de azul. Como al principio.

04 diciembre 2006

LUNES



Empecemos el día. Es lunes, es cierto, pero será una semana especial. Hay dos fiestas. Eso está bien!. Esta tarde iré a la piscina ( si me decido).
Tengo ánimo de lunes. Pero hay que ponerle color al lunes, aunque a estas horas y a punto de salir de casa cuesta un poco de trabajo, lo reconozco. Son las 8 y media de la mañana. A ver qué nos depara el día.
En las calles parece que ya es Navidad. Han puesto luces por todas partes. En Hipercor, por supuesto, ya están dispuestos a atacar, unas estrellas gigantes de colorines nos recuerdan que ya tanemos que ir pensando en gastarnos un montón de dinero en regalos, y allí están ellos, claro, dispuestos a hacer el agosto, aunque sea diciembre.
En la tele también atacan ya, desde hace unos días. Turrón, lotería y juguetes a punta pala. Un bombardeo. Aparte de eso, en la tele, mucho espíritu navideño no es que haya. Ahí tenemos a los encantadores chicos de Gran Hermano ( en donde a veces he recalado por accidente) poniéndose verdes unos a otros a todas horas. Ahí tenemos los programas de cotilleo donde despluman alegremente al personal sin importarles un bledo si les faltan al respeto o no. Como buitres, vamos. Eso sí, en telecinco ya se encargan de ponernos pelis con mucho espíritu navideño... De esas, ya se sabe.
Yo por mi parte lo que más espero de la Navidad son las vacaciones. Y los reencuentros. Eso hace que todo merezca la pena.
Ala, al toro, que se hace tarde!